septiembre 03, 2006

Contrapuntos, improvisaciones y performance

marzo 5, 2006

¿ Qué les parecería si un respetable músico les dijera que está componiendo obras, en que sólo hay una línea estructural , y, después los ejecutantes improvisan con objetos, tales como, una cinta scotch, una serie de mesas y sillas?, Para que no quede dudas, todo ello, sin instrumentos,aunque cada uno de los participantes son virtuosos de sus instrumentos ( Piano, fagot, guitarra), Debo confesar que creí que todos ellos, se habían vuelto locos, sin embargo, voy a tratar de explicar lo que ellos hacen, construyen, ejecutan, actuán, actividad que recibe el genérico nombre de performance.

Imaginense un escenario con una líneas paralelas en el suelo, ( el scotch lo usan para marcar ciertas distancias, así pegado al suelo), a cada lado de esta vía virtual, colocan mesas y sillas, dispuestas a ambos lados, y, sin mucho preámbulo empieza la música, uno de los ejecutantes camina en el centro desplazándose con pasos regulares, los otros ejecutantes están apostados frente a las mesas,digamos, puntos de conatcto, y, así cada vez que el caminante pasa frente a uno de estos puntos de contacto, van emitiendo ciertos ritmos, golpes, voces, cantos, configurandose un caleidoscopio que no resulta fácil de explicar, Sin embargo, como todos son ejecutantes clásicos, van cambiandose de posiciones en las mesas y sillas, estrechando o ampliando la ruta del caminante, cambiando la velocidad y los ritmos, y, aquí afirmense, porque toda la estructura sucede al viejo estilo del Maestro Bach, hay contrapunto, secuencias en fuga, en espejo, reversa, cromàtica,y, así, simplemente, cambian el ordenado teclado, por una instrumentación improvisada con objetos y cosas, mejor no les cuento, un resultado sensacional, que tiene de cabeza a unos sesudos profesores y estudiantes del viejo mundo, después de todo, no estaban tan locos, O sí ?
posted by Miguelángel at 7:31 PM 3 comments links to this post

1 comentario:

Rafael Gaia dijo...

It is reported that the renowned Stradivarius (1644-1737 AD) handmixed his own propolis varnish to polish his handcrafted instruments. Having made only 1,116 stringed instruments, no one has ever been able to duplicate his workmanship or his recipe for this varnish.